Como ya decía el dia de ayer "previsiones inciertas", finalmente no se cumplieron, al menos del todo. Solamente dos esforzados ciclistas no se amedrentaron por la climatologia y a la hora prevista iniciaron una nueva andadura, que aunque podía parecer que nos ibamos a mojar, una vez que salimos de Ciudad Real, con bastante niebla por cierto, a los 10 Kmts. más o menos, esta desapareció por completo y nos encontramos con un panorama antes soñado, ni una gota de lluvia, ni una gota de aire, una temperatura ideal y camino por delante para dar pedales.
Una vez llegado al pantano del Vicario y siendo este bordeado por su margen derecha, nos presentamos casi en un suspiro en el Peralbillo, para desde allí por el Puente de Hierro, ya famoso en nuestras rutas, adentrarnos en el corazón del parque forestal de La Atalaya, donde hicimos cumbre y donde se inicio una suave llovizna, que hizo que el descenso fuera si cabe más emocionante, hasta nuestra llegada a casa.
Dignos son de mencionar los colores que nos ofrece el otoño, lleno de tonalidades ocres, que junto a los olores del monte hacen de esta zona un lugar privilegiado para practicar el MTB.
¡¡Y la semana que viene más!!
1 comentario:
Muuuu acertaa la miusic si señor!!!
Ahora si!!!
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